Gimnasio del Colegio Maravillas, obra del arquitecto Alejandro de la Sota
Construcción ejecutada mediante una arquitectura sobria, despojada de todo lo superfluo, dejando vistos tanto los materiales como la estructura y desfigurando los límites con la arquitectura industrial.
Una arquitectura “esencial” que responde a un programa de necesidades y cuyo resultado es uno de los mejores ejemplos de la Arquitectura Moderna Española.
«Este edificio es una de las obras maestras de su autor y constituye un icono de la arquitectura española del siglo XX. Su ubicación en un solar con un desnivel de 12 m entre el colegio y la calle de Joaquín Costa condicionó la respuesta arquitectónica, pues el programa se alojó bajo el patio de juegos. Con una sección emblemática, De la Sota cubre el gimnasio con un sistema de grandes cerchas perpendiculares a fachada donde introduce varias aulas —iluminadas junto al gimnasio por el mismo hueco horizontal corrido en fachada— que aprovechan la forma parabólica del cordón inferior para crear una disposición de auditorio. La utilización sincera y de carácter casi fabril de los materiales no impide la grata calidez de los acabados, que proporcionan un fuerte componente humano al edificio.
Los alzados son un modelo de abstracción y austeridad, carentes de estilo y referencias lingüísticas, pero sin obviar el medio urbano donde se encuentran. Los paños de ladrillo se combinan con las amplias ventanas rematadas por un lucernario inclinado, los miradores y la estructura metálica vista, en una labor de búsqueda de la pura esencia de los materiales y de las formas arquitectónicas».
Alberto Sanz Hernando. Servicio Histórico. Fundación Arquitectura COAM