«El Laboratorio registra un extenso número de intentos y teorías que van desde las de Ruskin y Morris, a los racionalistas, constructivistas y productivistas rusos con su Vchutemas, y otros laboratorios, hasta las últimas experiencias de Bill, Maldonado, etc., pasando por el ejemplo más conocido en occidente del Bauhaus».
Fragmento del manifiesto del Laboratorio de Formas
Actualmente se expone en la galería José de la Mano de Madrid la muestra Monika Buch. Una española en la HfG de Ulm (1956-1958), un recorrido por los trabajos académicos de la única persona de nacionalidad española que realizó sus estudios en la célebre escuela alemana, dos años después de su fundación en 1953.
Como se recuerda en el catálogo de la exposición,
«El programa de estudios de la HfG —Hochschule für Gestaltung / HfG Ulm— comienza con un curso básico, Grundkurs, común para todos los alumnos, cuyo principal objetivo es la iniciación visual. Éste es posiblemente el cambio más significativo respecto a cualquier modelo precedente: se abandonan posiciones subjetivo-expresionistas (Itten, Klee, Kandinsky) o experimentos formalistas (Moholy-Nagy) a favor del estudio de la percepción y las leyes que la rigen».
Hace poco tiempo, otra exposición itinerante, llamada Modelos de Ulm 1953-1968. El diseño de la nueva Alemania, conmemoraba los cincuenta años de la fundación de la escuela, pionera en la enseñanza, la investigación y el desarrollo proyectual en todas las escalas del diseño: desde el tratamiento de la información gráfica a la arquitectura.
Entre otras sedes, los Modelos de Ulm se expusieron en las antiguas fábricas de Sargadelos (Cervo, Lugo). Allí pudimos observar el trabajo de ilustres profesores como Otl Aicher, Tomás Maldonado o Max Bill, y la herencia que recibieron, de una manera tan directa como crítica, desde la Bauhaus, de dónde también procedían algunos de los docentes, como Josef Albers, Johannes Itten, Walter Peterhans o el propio Max Bill, autor también de los edificios de la nueva escuela.
Resultaba simbólico disfrutar de esta exposición en un marco tan significativo como la antigua fábrica de Sargadelos, en el mismo lugar dónde durante los siglos XIX y XX se produjeron dos de los momentos más importantes en la historia del diseño industrial en Galicia: Inicialmente, el espíritu ilustrado de Antonio Raimundo Ibáñez logró, con su empresa de loza, satisfacer una necesidad de mercado vinculándola a los recursos propios de la zona, contando con la primera siderurgia integral de la península y convirtiéndose en una manufactura cerámica pionera al introducir en España los sistemas mecánicos de producción.
Después, en el año 1968, y como parte de un amplio proyecto iniciado con anterioridad en el exilio argentino de la mano de Isaac Díaz Pardo y Luis Seoane López, se restaura la actividad industrial en Sargadelos. Ese gran propósito, bajo el acertado nombre de «Laboratorio de Formas» incorporaba investigación, creación, debate, divulgación… desde el diseño editorial hasta la arquitectura de los nuevos centros de producción, ideas introducidas en un manifiesto fundacional que, además de sus intenciones, dejaba constancia de sus influencias y precedentes. Al igual que la HfG de Ulm, el Laboratorio de Formas generó un modelo propio, que serviría para conducir a Galicia hacia la modernidad recuperando la industria desarrollada previamente en Sargadelos por Raimundo Ibáñez, quién dejó escrito:
«La población es la que constituye la riqueza y la fuerza de los Estados. No puede sostener el progresar sino por medio de la industria, fábricas, comercio y navegación, cuyos ramos son el poderoso agente de la industria, que es la primera, la más esencial e indispensable de las artes».
Antonio S. Río Vázquez . Doctor arquitecto
A Coruña. marzo 2015
El Laboratorio de Formas de Galicia: reconstruyendo la identidad regional a través de la arquitectura.
«El Laboratorio de Formas es un proyecto interdisciplinar impulsado por
Luis Seoane e Isaac Díaz Pardo desde el exilio argentino a mediados del
siglo XX, con el objetivo de reconstruir la identidad y la memoria de
Galicia a partir del estudio y la divulgación de las formas existentes
en su historia y tradición. Entre sus líneas de actuación se fija la
recuperación de la industria cerámica creada por Antonio Raimundo Ibáñez
en Sargadelos (Lugo) a comienzos del siglo XIX.
[…]
Por Antonio S. Río Vázquez número 3 de ZARCH Journal of interdisciplinary studies in Architecture and Urbanism
http://ow.ly/Lpbg1