El presente libro conforma, junto con La arquitectura del patio (2005) y La arquitectura compuesta por partes (2009), una trilogía en la que se analizan los tres grandes sistemas de hacer arquitectura, vigentes durante muchos siglos, incluido el XX, y que cobijaron distintos modos de entender la arquitectura, aunque fieles siempre a determinados principios.
Son dichos principios los que nos permiten comprender estos sistemas como tales, haciéndonos ver que la arquitectura, aunque no cuenta con métodos completamente exactos y que estos cambian con el tiempo, no ha de verse como una disciplina azarosa, sino presidida por la razón, el buen sentido y una notable continuidad.