A muchos el amor por la arquitectura nos hace venerar a sus autores, querer saber más de sus vidas y, ay, de sus muertes. Parece como si así fuéramos capaces de entenderlos mejor y de valorar más sus obras, que son, en definitiva, las únicas que importan. Estas muertes de grandísimos arquitectos los bajan del inalcanzable pedestal, los hacen más humanos y nos unen más a ellos.
Por otra parte, cuando leemos un relato sobre alguien estamos leyendo también de alguna manera un relato sobre nosotros mismos, y así sentimos, de esta retorcida manera, una sintonía con la gran arquitectura.
Os presentamos un juego literario, una broma, un pasatiempo que manifiesta desde la primera línea hasta la última un encendido amor por la arquitectura y los arquitectos.
Es una colección de veintitrés relatos sobre las muertes de veintitrés arquitectos ilustres:
1.- Caín
2.- Dédalo
3.- Hiram-Abib
4.- Apolodoro de Damasco
5.- Michelangelo Buonarroti
6.- Sinan Ibn Adülmennan
7.- Francesco Borromini
8.- Claude-Nicolas Ledoux
9.- Frederick Law Olmsted
10.- Antonio Sant’Elia
11.- Louis Henri Sullivan
12.- Antoni Gaudí i Cornet
13.- Charles Rennie Mackintosh
14.- José Manuel Aizpúrua y Azqueta
15.- Josep Torres Clavé
16.- Giuseppe Terragni
17.- Lilly Reich
18.- Ivan Ilich Leonidov
19.- Le Corbusier
20.- Louis I. Kahn
21.- Carlo Scarpa
22.- Albert Speer
23.- Enric Miralles