Una pequeña vivienda para vacaciones en Mera –Oleiros –, fruto del encargo de una familia con dos hijos.
Un entorno amable en lo natural, a una escala intermedia, en un contexto apto para ser vivido a pie, pero difícil en lo próximo construido. Ausencia de referencias en su entorno más allá de la orientación. Una parcela ostensiblemente triangular, con más de setenta metros en linde con vial.
Se opta por una forma pura, un cuadrado de 12.40m, que permite evadirse del contexto, para centrarse en la relación íntima con la parcela y la naturaleza próxima.
Se proponen límites que desdibujan la forma, prolongándose para definir un garaje, retirándose para crear espacios exteriores de estar o envolver elementos de trabajo. Sólo a partir de la cota +2.20m. Se materializa masivamente en forma de sólido de hormigón armado visto que matiza sus alturas en sección según las funciones interiores que se desarrollan en cada espacio –3.20m. estar, 2.50m. dormitorios, 2.20m. almacenaje/aseos, 2.70m. cocina…–
Constructivamente se mima la definición estructural con dos objetivos: prestar atención a la envolvente térmica para garantizar un buen comportamiento energético y establecer la posición del resto de acabados. Para ello se propone una doble estructura: la interior, que es envuelta en aislamiento térmico para mantener su inercia, y la exterior, a modo de viga de 15x150cm que define un perímetro y se cuelga de la primera mediante conectores metálicos. Se resuelve el conjunto con, únicamente, ocho apoyos.
Al exterior, y hasta la cota 2.20, el cerramiento se resuelve con una fachada trasventilada con tabla de pino cuperizado. El resto de acabados, interiores y no estructurales, son resueltos con pavimentos continuos de linóleo y revestimientos verticales blancos.
Buscando sistemas pasivos para una mayor sostenibilidad, se establece ventilación cruzada natural, pudiendo realizarse en ambos sentidos de la vivienda. Los porches generan confort y protección en invierno y verano, marcando la transición interior-exterior en la vida diaria. La producción de agua caliente se realiza mediante una bomba de calor aerotérmica reforzada con panel fotovoltaico, contando también con un sistema de recuperación de calor de doble flujo para una mayor optimización de la eficiencia de la residencia.
La solución en una sola planta se vuelca y abre la vida al jardín. El estar, comedor, cocina son siempre partícipes del exterior, mientras los lugares de descanso se resguardan y protegen con la zona de almacenaje.
La vida se desarrolla prescindiendo de espacios inútiles con la finalidad de optimizar cada m2. Porche norte -filtro acceso-, porche sur -filtro parcela-, día/noche y almacén/instalaciones. Todos los espacios de la vivienda cuentan con iluminación natural, pues de esta manera se hace palpable el transcurso del tiempo y se valora la importancia de la luz como material intangible, independientemente del uso del espacio. No existe lugar baldío.
Una vivienda con un mínimo mantener y un máximo de deleite del tiempo libre y «de lecer», que no presente mayor preocupación a sus habitantes que la del disfrute.
Obra: Vivienda Unifamiliar en Mera
Emplazamiento: Mera, Oleiros, España
Autores: Sabín-Blanco Arquitectos slp. (Patricia Sabín y Enrique Blanco)
Arquitecto técnico: Rebeca Blanco
Cliente: Privado
Fecha: 2017
Superficie construida: 186,07m2
Fotografía: Héctor Santos-Díez | fotógrafo de arquitectura | Sabín-Blanco Arquitectos slp
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