En el mercado podemos encontrar soluciones para la construcción de cubiertas aparentemente más económicas o que prometen una instalación más rápida y sencilla que la teja cerámica.
Sin embargo, al analizar detenidamente las prestaciones de todas las opciones (puedes consultar en el tejado de tejas, podemos ver que lo que se presenta como una solución más económica puede suponer un gasto mayor a medio-largo plazo. En el caso de las cubiertas, sin lugar a dudas, apostar por la teja cerámica es sinónimo de inversión por varios motivos:
1. Por su durabilidad y resistencia
La teja cerámica es un material muy resistente al daño mecánico (golpes, arañazos) y a las inclemencias del tiempo, permaneciendo inalterable a lo largo de los años y ofreciendo una protección extraordinaria a la vivienda. En comparación, otros sistemas pueden verse seriamente comprometidos si se producen arañazos durante su instalación, ya que el material perderá la protección contra la corrosión.
Además, su vida útil puede alargarse hasta más allá de los cien años, frente a otras soluciones con ciclos la mitad de duraderos.
2. Por su versatilidad, economía y diseño
La teja cerámica destaca por su versatilidad, ya que se puede emplear en todo tipo de cubiertas –incluso en aquellas con inclinaciones inferiores a los 15 grados– y, en algunas ocasiones, en la propia fachada. Su empleo está recomendado tanto en obra nueva como en rehabilitación, por delante de otras soluciones ya que posibilita realizar la obra de manera rápida, segura y más económica.
Así, el empleo de teja cerámica facilita la sustitución de las piezas dañadas de manera individual, pudiendo repararse solo aquellas partes de la cubierta que presentan daños y no la cubierta al completo.
3. Por su seguridad y confort
Esta solución garantiza una buena protección frente al ruido, lo que mejorará el confort y la salud del usuario en el interior de la vivienda; no desprende sustancias nocivas y tiene un buen comportamiento ante el fuego, retrasando su propagación hasta su extinción en caso de incendio.
4. Por su eficiencia y respeto medioambiental
Otro aspecto que juega a favor de la teja cerámica frente a otras soluciones es su elevado valor medioambiental. Al ser un material natural, fabricado a partir de arcilla (una materia prima renovable), presenta una elevada inercia térmica, contribuyendo a mejorar el aislamiento de la envolvente del edificio. Si se opta por una instalación con ventilación bajo teja, además se posibilita la creación de una cámara de aire que contribuye a incrementar el confort térmico en el interior de la vivienda y a prevenir patologías, como la aparición de manchas de moho y/o humedad.
Su uso es altamente recomendable en aquellas rehabilitaciones que se realicen con criterios de eficiencia energética, estando incluso recomendada para la construcción de viviendas bajo estándares tan ambiciosos como el Passivhaus.
Por todos estos motivos, apostar por el empleo de material cerámico, tanto en la reparación como en la renovación total de la cubierta, es todo un acierto, ya que estaremos contando con una solución con la larga vida útil que, además, nos permitirá mejorar el confort, la eficiencia y la seguridad en nuestras viviendas. El tejado de tejas, una inversión segura.