La arquitectura de la esencia: L. Barragán y A. de la Sota pretende, en un marco temporal acotado al siglo XX, abordar el proceso de ideación desde diversas ópticas, todas ellas complementarias. Los autores de los textos desarrollan un aspecto de la lógica del proceso de proyecto, a través de diferentes visiones de las obras de los autores seleccionados. Creemos que sus aportaciones servirán para arrojar luz sobre el rigor y la claridad de los criterios adoptados por Barragán y de la Sota en sus proyectos arquitectónicos. Lógica del proceso que se revela en la esencia de los proyectos, la arquitectura de la esencia.
Barragán y de la Sota, en un evidente paralelismo en el tiempo, ejercen su magisterio en las dos orillas del Océano Atlántico sometiendo sus creaciones a un proceso de depuración continua. Este hecho les permite fundir lo vernáculo con lo actual de modo independiente del lenguaje arquitectónico empleado por ambos.
Las diferencias que afloran entre los maestros enriquecen los respectivos discursos en el proceso proyectual. Barragán maneja la escasez de recursos materiales como un arma creativa, con una confianza ciega en el oficio. De la Sota explora las condiciones de la tecnología de su tiempo y la utilización de los materiales en lugares para los cuales no fueron pensados en un inicio.
Y todo ello, unido a un enriquecimiento personal mediante la formación en las nobles artes y el conocimiento de otros mundos arquitectónicos, configura el escenario en el cual ambos maestros desarrollarán sus planteamientos proyectuales en un intento por descubrir lo oculto, lo misterioso de las cosas comunes. Esta actitud vital, introspectiva, de silencios, compartida por Barragán y de la Sota, les conduce por un camino de un lenguaje propio, personal, mezcla de sus vivencias personales y los planteamientos racionalistas de la modernidad.